El juez penal de Rafaela, Osvaldo Carlos, dictó la prisión preventiva sin plazos para Miguel Ángel Beresvilj, el joven de 23 años que la semana pasada quemó a su madre con nafta en Bella Italia. “Jamás quise lastimar a mi madre”, dijo el acusado, y armó que se trató de un accidente, aunque hay dudas sobre sus verdaderas intenciones.
En los primeros momentos del pasado miércoles, Beresvilj, llegó hasta la casa que su progenitora (Romina Leiva) posee en la localidad de Bella Italia, quien se encontraba en el interior junto a su actual pareja (Roberto Mansilla) y cuatro hijos menores de la mujer, fruto de un anterior vínculo amoroso.
El joven detuvo su moto frente a la vivienda y luego, extrajo combustible del tanque de su rodado, lo juntó en un bidón y luego comenzó a esparcirlo sobre el techo del automóvil, propiedad de Mansilla, con quien mantiene una fuerte enemistad.
Beresvilj es hijo de Romina con un hombre que luego de nacido los abandonó. Tiempo después, la mujer se unió a José Palmero, que es el padre de los cuatro chicos, todos menores de edad, que viven con ella. Cuando esta relación terminó, Romina se vinculó sentimentalmente con Mansilla y fue allí cuando se iniciaron los desencuentros con su hijo mayor por el maltrato del hombre a su madre.
Se reiteraron las denuncias por violencia de género de Mansilla contra Leiva y también contra los hijos, hechos que motivaron la intervención de Beresvilj en defensa de su mamá y sus medio hermanos. A pesar de estas situaciones Romina permaneció al lado de su pareja, situación que provocó un hondo resentimiento del joven.
Todo el rencor acumulado empujó al imputado a querer prenderle fuego al Renault Clio de Mansilla, que según Beresvilj compró con plata que pertenece a su progenitora, y una vez que lo había rociado con nafta, su madre salió de la vivienda y se interpuso entre él vehículo en el momento que le arrojó un fósforo y las llamas alcanzaron a la mujer.
De todas maneras, la Fiscal Ángela Capitanio no dio crédito a los dichos del incendiario debido a que las pericias demostraron que la mujer llegó al hospital literalmente bañada en nafta. Además, los profesionales que la atendieron en la guardia del hospital testimoniaron que el lugar quedó impregnado con olor a nafta.
Asimismo, la funcionaria del MPA, apuntó que bomberos sostiene, si bien no es concluyente el informe, que al presentar Romina olor a combustible se estaría en presencia de dos zonas de fuego distintas: por un lado la víctima y por otro el automóvil.
Vale mencionar que en la sala de audiencia estuvieron presentes varios familiares del joven, quienes testimoniaron a su favor y los denieron como una buena persona, trabajadora y no violenta, pero reconocieron los problemas que mantiene con Mansilla.
Ahora, la justicia debe determinar si cree la versión brindada por Beresvilj, quien no posee antecedentes de ningún tipo, o da por cierto la acusación de la Fiscalía basada en los dichos de Mansilla, quien arma que le lanzó combustible a su madre y le tiró un fósforo para prenderle fuego.