Sin expectativa de repunte significativo en las próximas semanas, la bajante del río Paraná se acentuó en los últimos días. La postal de las Cataratas del Iguazú –con cascadas donde solo se aprecian hilos de agua–, cuyo caudal se encuentra reducido en el orden de la octava parte del valor normal de marzo, es una muestra elocuente de la bajante extraordinaria que experimentan los cauces de agua en tramos del territorio argentino.
En la capital provincial, la altura registrada el miércoles fue de 1,70 metros en el puerto local, según los datos de Prefectura Naval y hablan de una tendencia bajante desde hace varios días. A ese ritmo, caerá por debajo de los 1,54 metros marcados en diciembre del año pasado, una cifra que se ubicó como la más baja de los últimos 47 años.
El Instituto Nacional del Agua (INA) pronosticó que en los próximos días el caudal del Paraná en Santa Fe podría descender hasta 1,36 metros, más de dos metros por debajo del promedio histórico para abril, que se sitúa en 3,30 metros.