El líder del Partido Liberal Democrático Ruso afirmó que podrían usar a las personas privadas de la libertad para buscar una cura al covid-19 y a cambio reducirles la pena.
Un ex candidato a presidente de Rusia propuso usar a los presos para probar vacunas contra el coronavirus, en medio de la emergencia sanitaria desatada en ese país por la pandemia.
“Los prisioneros deberían ser utilizados como conejillos de indias para las vacunas contra el Covid-19 y acelerar la carrera por una cura”, dijo el líder del Partido Liberal Democrático Ruso (LDPR), Vladimir Zhirinovsky.
Zhirinovsky sostuvo en una entrevista que miles de reclusos estarían de acuerdo, ya que a cambio de recibir las inyecciones experimentales, se les reducirían a la mitad sus condenas.
“Digamos que un preso está cumpliendo una sentencia de 10 años. Le diremos: ‘Aquí hay un nuevo medicamento. Será probado en usted en un laboratorio dos o tres meses y su condena se reducirá a la mitad”, explicó el ultranacionalista pro Vladimir Putin.
De forma inmediata, la propuesta del ex diputado -quien ocupó el tercer lugar en las elecciones presidenciales rusas de 2018- fue severamente criticada por la fundación de derechos de los prisioneros “Rossiya Sidyashchaya”, informó Crónica.
“El plan de utilizar a los reos como ganado es una práctica absolutamente normal para Rusia”, manifestó el letrado Alexei Fedyarov, al tiempo que ratificó que algunos prisioneros pueden estar de acuerdo con la medida “solo para reducir el tiempo en la cárcel”.
Por su parte, un miembro del consejo de derechos humanos del presidente ruso, Alexander Brod, instó al presidente ruso, Vladimir Putin, a no aceptar el plan. “Nuestros convictos no son conejillos de indias, en los que se pueden realizar experimentos”, opinó.
“Gracias a Dios, dejamos atrás las prácticas del Gulag, cuando los prisioneros eran percibidos como esclavos libres que podían ser arrojados a trabajar en sitios de construcción, pavimentación de carreteras”, concluyó.