La carga se desprendió de la parte trasera de un camión. No hubo que lamentar un accidente de mayores proporciones.
Minutos después de las 9 del viernes un camionero se dirigía hacia el este de la provincia de Santa Fe cuando dejó atrás Bulevar Gálvez y subió al viaducto Oroño para seuir su viaje, en ese momento los ladrillos “se aflojaron” de la parte trasera del camión y se desprendieron.
De un momento a otro todo la mayoría de los ladrillos cayeron a la carpeta asfáltica del puente Oroño (mano hacia el este) y pudo ser una tragedia. No hubo que lamentar ni víctimas ni daños materiales sobre otros vehículos.
Tras la intervención de efectivos de la Policía Motorizada, se limpió la carpeta asfáltica y el camión continuó su marcha. Sobre el puente quedó todo el polvo de ladrillo por lo que se recomienda circular con precaución.