Un pescador la encontró debilitada, desorientada y con hipotermia a dos kilómetros de la costa de Puerto Colombia. Los detalles.
La mujer, identificada como Angelica Gaitan, de 46 años, perdió el contacto con su familia hace dos años. Fue un pescador el que la encontró el pasado día 26, debilitada y con hipotermia, y no sabía dónde estaba.
La policía investiga ahora qué fue de ella durante estos dos años que estuvo desaparecida y cómo acabó en el mar.
En un vídeo se ve a la mujer flotando en el agua y sin moverse mientras un pescador se dirige a ella para ayudarla. Tras lanzarle un salvavidas y arrastrarla hacia el barco, consigue subirla a la embarcación, donde visiblemente debilitada rompe a llorar.
Fue rescatada mujer a 3 kilómetros de las costas de Puerto Colombia.
No hay claridad aún sobre los motivos por los que se encontraba en medio Del Mar. pic.twitter.com/ZCjf24CRhZ
— Susana De León (@Susanadeleonc) September 26, 2020
Según los primeros informes, habría pasado unas ocho horas flotando en el mar y llegó al hospital en estado de shock. Tras contactar con su hija, ésta aseguró que llevaba sin tener contacto con ella dos años. Ahora, tanto ella como su hermana están recaudando dinero para trasladarla a Bogotá, donde viven ellas, y que pueda ser atendida por la familia.
Se fue de su casa por el maltrato
La mujer señaló que su ex marido la golpeaba constantemente: “Los maltratos comenzaron en el primer embarazo, me golpeaba, abusaba violentamente de mí. En el segundo embarazo seguían los maltratos y no me pude alejar de él porque las niñas eran pequeñas. Muchas veces denunciaba, pero la Policía se lo llevaba 24 horas y cuando estaba en la casa de nuevo, volvían las agresiones”.
El día que decidió irse de su casa fue por una brutal agresión que le propinó su pareja: “Estuve deambulando por las calles durante casi seis meses y después fui a buscar ayuda a la oficina de la mujer. Allí me mandaron a un hogar de paso, pero no fue suficiente porque no recibí nada de ayuda y me dijeron que se había acabado la medida de protección porque él ya no estaba en Barranquilla”.
De nuevo en la calle, Angélica solo creyó en la muerte como solución: “Estando en la orilla del mar, me encontré con la soledad y decidí lanzarme al mar, dejé que me llevara y esperar que pronto acabara esta pesadilla”. Estuvo a la deriva ocho horas, hasta que finalmente fue rescatada por el pescador.