El sistema sanitario sigue en alta tensión aunque ha comenzado a bajar levemente la demanda.
La provincia contabilizó 315 muertos esta semana, de los cuales 241 son de Rosario, que tiene hoy un indicador de 1,58 fallecidos confirmados por cada 100 mil habitantes.
En Rosario la tasa de recuperación es más alta que a nivel provincial (89%), pero del mismo modo los 812 fallecidos registrados también hacen que la tasa de letalidad, que hasta septiembre estuvo por debajo de un dígito, progresivamente venga en ascenso a lo largo de octubre y esta última semana haya crecido aún más, ubicándose en el 1,58%.
La ocupación de camas críticas se mantuvo en el 82 por ciento en el sector público, en tanto que en los efectores privados, donde la semana pasada la situación era más crítica, esa proporción descendió del 98 al 92 por ciento.
En realidad existe en Rosario un contraste entre datos que podrían leerse como alentadores, pero aún hay números que siguen preocupando.