En la Universidad de Tsukuba, en Japón, un grupo de científicos ofrecieron recientemente su propia visión de la relación entre la tecnología más moderna y la naturaleza. Los investigadores presentaron unas cucarachas cíborg que en el futuro podrían ser capaces de realizar varias labores domésticas. “Son como los duendes y el zapatero”, dicen los autores del estudio.
Los investigadores modificaron los cuerpos de cucarachas gigantes de Madagascar con unos implantes cibernéticos para controlar a los insectos mediante una estimulación eléctrica de sus antenas. Concretamente se trata de electrodos, una antena de chip, una batería y un píxel que, colocado en la espalda de la cucaracha, puede usarse como pantalla. La ventaja que presentan las cucarachas es que pueden desplazarse por las paredes y meterse en lugares recónditos a los que otros robots no pueden acceder.
Un enjambre de estas cucarachas puede transportar objetos o hacer dibujos sobre papel y realizar tareas. En caso de no necesitar más su asistencia, el dueño puede apagar su sistema de control. “En el futuro [las cucarachas cíborg] aparecerán de la nada sin que las veamos, harán su trabajo y después se esconderán”, afirma el equipo investigador del proyecto.