Tras detectar esta semana los primeros casos de transmisión local en siete meses, el estado de Australia Meridional iniciará un confinamiento obligatorio de seis días a partir de esta la medianoche de este miércoles.
El estado australiano de Australia Meridional confinó a sus más de 1,8 millones de habitantes tras detectar su primer rebrote de coronavirus en siete meses, y por una cepa que se reproduce “muy rápidamente” y tiene una inusual capacidad de transmisión.
La cuarentena, que comenzó a regir durante seis días en las primeras horas del jueves, incluye el cierre de escuelas, universidades, bares y cafés, y solo una persona por hogar podrá salir de casa cada día, y por razones específicas.
Las restricciones también exigen que la mayoría de las fábricas cierren, y que se suspendan las bodas y los funerales, mientras el ejercicio al aire libre queda prohibido y el uso de barbijos es obligatorio, informó la agencia de noticias AFP.
El fin de semana pasado, el estado de 1,8 millones de habitantes informó cuatro casos de coronavirus, sus primeras infecciones locales desde abril.
Más casos fueron apareciendo en los días sucesivos, y el total se elevó el miércoles a 23 tras la detección de siete más en las 24 horas previas, informaron autoridades de salud.
El premier del Estado, Steven Marshall, dijo en conferencia de prensa que el severo confinamiento actuará como un “interruptor” y reducirá el riesgo de que el brote se propague aún más.