“Estamos preparados. Nuestras previsiones son, en casi cualquier escenario razonable, que una parte muy sustancial de la población española podrá estar vacunada, con todas las garantías, a lo largo del primer semestre” de 2021, dijo Sánchez.
En un acto en Agoncillo, en la norteña región de La Rioja, el mandatario aseguró que España “será el primer país de la Unión Europea junto con Alemania en tener un plan completo de vacunación”.
“Hemos estado trabajando desde el mes de septiembre en este plan”, agregó Sánchez, y adelantó que los detalles se presentarán el martes próximo en una reunión de gabinete.
El mes pasado, el Gobierno español autorizó la futura adquisición de 31,5 millones de dosis de la vacuna desarrollada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford, como parte de un acuerdo de compra de la Comisión Europea con esta empresa farmacéutica, que prevé 300 millones de dosis para el conjunto del bloque.
Hace dos días, la Agencia Española del Medicamento (AEMPS) autorizó además el inicio de la última fase del ensayo clínico de una vacuna en dos dosis contra la Covid-19 del grupo estadounidense Johnson & Johnson, que también se llevará a cabo en otros ocho países.
Además, el Gobierno español está pendiente de Pfizer y BioNTech, que pidieron autorización en Estados Unidos para comercializar su vacuna contra el Covid-19, que cuenta, según adelantaron, con una eficacia del 95%.
España es uno de los países de Europa más golpeados por la epidemia, con más de 42.000 muertos y 1,54 millones de casos diagnosticados desde principios de año.
Actualmente rige en todo el país un toque de queda nocturno, salvo en las islas Canarias, y hay numerosas limitaciones de movimiento.
En algunas zonas, los españoles no pueden salir de su municipio salvo por razones justificadas como ir al médico, ir a trabajar, o atender a personas dependientes.
Fernando Simón, epidemiólogo en jefe del Ministerio de Sanidad, destacó ayer que la incidencia del virus sigue bajando poco a poco, y habló de una tendencia “favorable”.
No obstante, la presión en los hospitales sigue siendo “importante” y “todavía no podemos confiarnos en absoluto”, matizó.