La campaña avisa a los usuarios desprevenidos de una “infracción de copyright” y apuran a las víctimas con un lapso corto para accionar.
El mensaje parece cierto, tiene “argumentos” y no deja demasiado tiempo para reaccionar: o hacemos algo o nos cierran la cuenta de Instagram.
“Hola, usuario de Instagram, hemos recibido muchas quejas sobre tu cuenta deseamos informártelo antes de eliminar tu cuenta, algunas de las publicaciones van en contra de las pautas de nuestra comunidad respecto de los derechos de autor. Si crees que la infracción de derechos de autor es falsa, hacé tu devolución”, dice el texto que llega a los mensajes directos de la red social. Y después el golpe final, la carrera contra el tiempo: “De lo contrario, tu cuenta se eliminará permanentemente de la plataforma en 72 horas”, amenazan.