En la madrugada del domingo personal policial desactivó uno de estos eventos donde además secuestró material estupefaciente (pastillas de éxtasis) y se llevó detenidos a los dos organizadores; uno de ellos empleado de Aguas Santafesinas y el otro un mecánico de un taller donde se reparan vehículos policiales.
En horas tempranas de la mañana, numerarios de Cuerpo Guardia de Infantería junto a personal Municipal se dirigieron a calle Hernandarias y la costa del río Salado, donde se estaba llevando a cabo una fiesta clandestina.
Una vez arribados, los funcionarios divisaron una gran cantidad de vehículos y personas, los cuales al percatarse de la presencia policial se dispersaron en distintas direcciones.
Seguidamente, los uniformados verificaron el lugar y desde un descampado obtuvieron el secuestro de una carpa tipo “gazebo”; una pileta que contenía packs de agua mineral; un carro térmico con eje de dos ruedas; cuatro baños químicos y dos grupos electrógenos.
A continuación, los actuantes dieron con los responsables de la organización del evento; un joven de 23 años que es empleado de Aguas Santafesinas y otro de 27 que se desempeña como mecánico de un taller donde se reparan vehículos policiales. Lo curioso del caso es que éste último quiso “chapear” con esa cuestión para zafar del procedimiento.
En la requisa al vehículo de uno de ellos, secuestraron desde el interior una consola de sonido y pastillas de estupefacientes (éxtasis).
Por tal motivo, trasladaron a ambos jóvenes a la Subcomisaria 12°, donde les dieron intervención a las autoridades judiciales competentes.