Protestas sindicales están demorando las ventas a destinos como Rusia, Ucrania y Estados Unidos. Empresarios del sector destacaron la reapertura de la UE (50% de los limones y 30% de las naranjas que vende Argentina), pero advirtieron sobre nuevas condiciones de los países compradores.
La alegría no es completa. La semana pasada, los productores argentinos de cítricos celebraron la reapertura de la Unión Europea (UE), uno de los principales destinos de ese rubro agroindustrial, que decidió rehabilitar el ingreso a partir de este mes. Exportadores del NEA y del NOA se mostraron conformes con la resolución y destacaron que trae tranquilidad al sector, pero explicaron que se debe trabajar en las nuevas condiciones requeridas por los países compradores.
Además, las expectativas de producción de limón no son alentadoras con respecto al año pasado, debido a la sequía que afectó a las plantaciones, sobre todo durante la primavera.
El bloque comunitario había prohibido la importación en agosto pasado, tras detectar en un cargamento de limones algunos casos de la enfermedad denominada mancha negra.
Carlos Parravicini, de la Asociación Citrícola del Noroeste Argentino (Acnoa) afirmó: “Hay muchas barreras que tendremos que superar conforme avance la campaña: va a ser difícil, hay que trabajar mucho sobre el tema y veremos cuál es el grado de éxito que tenemos”.
Con respecto a la reapertura del mercado europeo, el ejecutivo destacó: “Vamos a ver si los parámetros que se nos exigen son fácilmente cumplibles o tienen un grado de conflictividad donde las producciones argentinas se vean limitadas”.
Además, agregó que existen algunos conflictos sindicales en la provincia de Tucumán con las paritarias de cosecheros y trabajadores de empaque que demoran los despachos a destinos como Rusia, Ucrania y Estados Unidos.
Ante el conocimiento de la noticia, Acnoa emitió un comunicado donde recalcó que en 2020, la Argentina exportó 256.866 toneladas de limón al mundo, por un valor de US$185 millones y recalcó que el 50% tuvo como destino la UE. El resto se repartió entre más de 40 mercados.
Durante el mismo año, también se exportaron 82.762 toneladas de naranjas por un valor de US$28 millones, y la comunidad europea representó el 30% de las ventas nacionales.
Perspectivas y limitaciones
En tanto, José Carbonell, presidente de la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus), afirmó que en el sector empresario existe “una expectativa muy fuerte de ir desarrollando mercados”. Y auguró que este será “un año de consolidación” de los destinos que se abrieron durante 2020, como China.
Con respecto a la reapertura del mercado al Viejo Continente, Carbonell consideró que los requisitos impuestos por la UE son de “duro cumplimiento” y podrían limitar “un poco la exportación”.
“La cosecha se inició primero en mandarina, luego en naranjas tempranas y la de limón hace poco tiempo. La campaña de exportación, que ya se inició con envíos a Rusia y Hong Kong, va a tomar fuerza la semana que viene. Las expectativas de producción de limón son a la baja por cuestiones climáticas de, por lo menos, entre un 10% o 15% hasta los 1,1 millones de toneladas. Hemos recuperado el mercado europeo, pero con una serie de requisitos e imposiciones que van a limitar un poco la exportación por eso confiamos en el desarrollo de otros mercados”, destacó el titular de la entidad.