Subieron 30% los homicidios. “Naturalizar la violencia es uno de los grandes riesgos de fractura social”, dijo el director de Política Criminal del MPA.
“La naturalización de la violencia es uno de los grandes riesgos en términos de fractura social. Cuando como sociedad empezamos a describir procesos de naturalización y de «justificación» de ciertas muertes que ocurren en determinados sectores sociales o urbanos como algo que no se puede modificar, genera inmovilidad para pensar e innovar en procesos de abordaje de la violencia. Debe llamarnos la atención a la sociedad en su conjunto y en particular a todos los sectores del Estado”, explica Gustavo González, director de Política Criminal y DDHH del Ministerio Público de la Acusación.
La violencia está latente y en alza, más aún que en 2020. Con 104 homicidios al 3 de junio de 2021, se superaron por 30% los 79 del mismo período del 2020.
Se consolida de esta manera en Rosario un proceso de ascenso que llevó a ser al año pasado el más violento de los últimos cinco.
“Esa dimensión da cuenta de ciertos factores del despliegue de la violencia que son de carácter estructural. Por un lado, la desigualdad social. En los últimos diez años en América Latina el crecimiento de la desigualdad social coincide con el aumento de los homicidios o de la violencia letal”, sostiene González.