Desde CAFMA realizaron un informe técnico que destaca la “innovación constante” en la fabricación local.
La Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA) realizó un completo informe que recopila los logros tecnológicos que Argentina generó en el rubro de las sembradoras, que lo distinguen en el mundo.
“Argentina se destaca por su alta eficiencia en la producción agropecuaria y para lograr tal posición ante el mundo, el desarrollo de la industria nacional de maquinaria agrícola ha sido y es un factor central“, introducen desde CAFMA.
Un aspecto clave para entender por qué la Argentina se destaca por sobre el resto de los países que fabrican sembradoras es la presencia de los contratistas rurales.
Este dato puede pasar desapercibido, pero la realidad es que reconfigura el uso de la maquinaria agrícola, dado que una sembradora, por ejemplo, puede estar en funcionamiento durante largos períodos de forma constante y debe adaptarse rápidamente a las diferencias de suelos o de cultivos.
Muy distinto es lo que sucede en países como Brasil o Paraguay, donde la mayoría de los dueños de los campos y productores son los dueños de las máquinas. Una vez que finaliza la siembra la sembradora queda parada entre 4 y 6 meses, dependiendo del cultivo.
Otra de las características que resaltan a la maquinaria argentina por sobre el resto es la adaptación que estos fierros generaron a medida que avanzó la Siembra Directa, dado que somos el único país en el mundo con más del 90% en implantar bajo esta modalidad.
Las sembradoras para siembra directa fueron “logradas a partir de la investigación y desarrollo de la industria nacional, que tuvo gran impulso en la década del ’80, y puede señalarse como uno los grandes hitos del sector“, destaca el informe.
Y completa: “El diseño y calidad de las sembradoras de directa desarrolladas por la industria nacional ha propiciado la exportación de máquinas y tecnología a países de importante producción agrícola. También ha permitido que técnicos argentinos se capacitaran y continúen capacitando a productores y técnicos de otros países en la cultura de la siembra directa o conservacionista”.