El equipo inglés, ganador de la Champions, igualó 1-1 ante el español, campeón de la Liga Europa. Pero fue más preciso en la definición y celebró un nuevo título en Irlanda del Norte.
El Chelsea, último ganador de la Champions, se erigió como nuevo campeón de la Supercopa de Europa tras imponerse este miércoles al Villarreal en la tanda de penales (6-5) después de que los 120 minutos del encuentro acabaran con empate a un gol.
El partido se jugó en Belfast (Irlanda del Norte), donde se adelantó el conjunto londinense en el primer tiempo con un gol de Hakim Ziyach y empató Gerard Moreno en el segundo.
En esta ocasión la tanda de penales no le sonrió al Villarreal, que ganó el pasado mes de mayo de esta forma al Manchester United en la final de la Liga Europa, con el último tiro atajado por el arquero argentino Gerónimo Rulli.
Esta vez el protagonismo fue para Kepa, español él, que ingresó faltando dos minutos para completarse el segundo tiempo suplementario reemplazando al titular Edouard Mendy, pura y exclusivamente por tener mejor estadística que el senegalés en la contención de penales.
Y la apuesta del entrenador alemán Thomas Tuchel le salió perfecta porque el guardavallas de 26 años contuvo dos remates, el último y decisivo al experimentado capitán Albiol. Previamente le había convertido el argentino Juan Foyth.