Un estudio demuestra que la deficiencia de hierro puede tener efectos perjudiciales en una isquemia aguda del miocardio.
El hierro es esencial para tener una función cardiovascular normal. En los pacientes con insuficiencia cardíaca crónica, la deficiencia de hierro es frecuente independientemente de la anemia y augura un peor pronóstico. Su corrección mejora los síntomas y la calidad de vida. Si bien el exceso de hierro se asoció con daño celular, la deficiencia de hierro en los síndromes coronarios agudos fue poco estudiada.
Una nueva investigación realizada por científicos del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBERCV) en el grupo de Enfermedades Cardiovasculares del Vall d’Hebron, España, demostró que los pacientes que sufren un infarto agudo de miocardio y presentan deficiencia de hierro tienen infartos de mayor tamaño y desarrollan con mayor frecuencia un remodelado adverso del corazón que aquellos pacientes con niveles normales de hierro. El estudio fue publicado en la revista JACC: Basic to Translational Science.
El estudio correlacionó la deficiencia de hierro con un mayor tamaño de los infartos, una obstrucción microvascular más extensa y un mayor riesgo de desarrollar remodelado ventricular adverso, tras analizar las resonancias magnéticas de 125 pacientes que habían sufrido un infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST (STEM) y hacer su seguimiento a los 6 meses.
“Nuestro estudio demuestra que no sólo el exceso, sino también la deficiencia de hierro puede tener efectos perjudiciales en el contexto de la isquemia aguda del miocardio. Los hallazgos justifican, de esta manera, ser prudentes sobre el uso de terapias para reducir el hierro en estos enfermos”, aseguran los autores del trabajo, Javier Inserte y José Barrabés.
Aparte del estudio en humanos, el trabajo incluye investigaciones experimentales realizadas en ratones alimentados con una dieta deficiente en hierro y sometidos a un protocolo que reproduce el infarto en humanos. Estos confirman los resultados obtenidos en pacientes y sirvieron para proponer el aumento del estrés oxidativo y la alteración de la producción de óxido nítrico como mecanismos responsables de los efectos perjudiciales de la deficiencia de hierro.
“Estos resultados justifican profundizar en esta línea de investigación, especialmente para evaluar si la corrección de la ferropenia puede tener efectos beneficiosos sobre la dilatación ventricular y el desarrollo de insuficiencia cardíaca en pacientes que han sufrido un infarto extenso”, explica Barrabés.
Qué le hace la anemia al corazón
“Se sabe que la anemia es un marcador de mal pronóstico de la insuficiencia cardíaca hace desde muchos años e incluso es consecuencia y forma un síndrome como el cardiorrenal. El tratamiento con hierro lo mejora transitoriamente”, plantea Juan José Herrera Paz (M.N. 85.175), jefe de Cardiología de Fleni.
Respecto al trabajo que asocia a la anemia con infartos más grandes, Herrera Paz aclaró que en los fines prácticos no tendrá grandes consecuencias. “Es muy interesante para tenerlo en cuenta, pero cómo prevenir que un paciente anémico se infarte, es algo complejo”.
El médico reconoce que un paciente anémico tiene “más trabajo cardíaco porque tiene más taquicardia. Eso se debe a que tiene que oxigenar todo el organismo con menos glóbulos rojos. Es un marcador, pero no necesariamente tendrá una consecuencia puntual en el corazón”, concluye.
Fuente: TN/Con Bienestar