Los vecinos atraparon a un hombre que junto con una mujer intentaron robar la moto de un delivery, lo golpearon y lo retuvieron hasta que llegó la policía.
Todo comenzó cuando pasadas las 20 un joven, que trabaja para una empresa de delivery, es abordado por una pareja que intenta robarle la moto.
Lejos de paralizarse por la acción delictiva, el repartidor comenzó a seguir al delincuente a los gritos hasta que con la ayuda de circunstanciales transeúntes y vecinos lograron detenerlo.
Inmediatamente arribaron al lugar colegas del muchacho, que hartos de ser víctimas de delincuentes, quisieron linchar al hombre que había intentado sustraer la moto.
En pocos minutos se había concentrado una gran cantidad de gente que a los gritos reclamaba que le dieran su merecido al ladrón mientras otros pedían serenidad a los más enardecidos.
Cuando el delincuente ya había recibido varios golpes por parte de la gente, arribó al lugar la policía, que cargó al hombre en una patrulla para llevarlo hasta la comisaría, no sin antes recomendarle a su víctima que asentara a la brevedad su denuncia, de lo contrario deberían liberarlo.