La excesiva exposición a la tecnología, el estrés emocional y la falta de movimiento son posibles causas de esta dolencia en menores.
Los padres no deberían desestimar los dolores de cabeza regulares que padecen sus niños y, sobre todo, no medicarlos por su propia cuenta a largo plazo, según recomienda la Sociedad Alemana del Dolor y la Sociedad Alemana de Migrañas y Cefaleas.
Presión para rendir, demasiado tiempo con el smartphone, delante de la PC o el televisor, el estrés emocional y la falta de movimiento son posibles causas para los dolores de cabeza que retornan una y otra vez. Y, según alertan estas dos sociedades, estos factores no hicieron más que reforzarse a causa de las estrictas reglas por la pandemia de coronavirus.
Entonces, ¿qué deben tener en cuenta los padres? Lo importante es que estos dolores no sean simplemente combatidos con medicamentos de venta libre. Sin embargo, esto ocurre con frecuencia, explica a DPA Gudrun Gossrau, de la Clínica Universitaria de Dresde, a cargo del ambulatorio para dolores de cabeza.
“Los analgésicos solamente deben ser tomados cuando se cuenta con una prescripción médica”, subraya Gossrau. De lo contrario, advierte, en caso de una ingesta frecuente incluso pueden aumentar el dolor de cabeza, ya que algunos fármacos no son adecuados para niños.
Para el especialista, lo central es que los niños y jóvenes afectados cuenten con un diagnóstico médico y, de ser necesario, reciban la terapia adecuada. Sin embargo, esto ocurre en muy pocos casos en la vida cotidiana, de acuerdo con su experiencia. La migraña y la cefalea tensional son los autodiagnósticos de dolor más comunes.
El llamado de la experta apunta a que si los niños o jóvenes tienen dolores de cabeza regulares, entonces existe una necesidad de tratamiento. Y detalla qué sencillas medidas pueden frecuentemente aliviar las molestias. Por ejemplo: “Modificar el ritmo cotidiano y dejar más tiempo libre para la distensión o sin el teléfono, así como beber suficiente agua y dormir siempre lo necesario. Menos presiones con los horarios y practicar deporte de forma regular también reducen considerablemente el dolor de cabeza”, sostuvo.
Asimismo, la experta advierte que el dolor de cabeza frecuente en niños y jóvenes también puede conducir a un círculo vicioso de caída de rendimiento, temor a la escuela y aislamiento. “Los padres no deben minimizar los dolores de cabeza ya que podrían afectar gravemente la vida cotidiana y el futuro de los jóvenes”, advirtió.
Cefalea tensional
“Cuando los niños tienen dolor de cabeza, muchas veces se trata de la llamada cefalea tensional. Si se presenta de vez en cuando, no hay motivo para preocuparse. Pero si los menores se quejan de manera reiterada y regularmente, lo mejor es acudir al médico”, sostiene la especialista. De esa manera, se puede evitar que la cefalea tensional se vuelva crónica o se convierta en migraña, señalan las asociaciones pediátricas.
Una buena manera de observar la molestia es llevar un diario. En él, padres e hijos pueden ir registrando de manera conjunta cuándo aparecen los dolores de cabeza, cuánto duran y cómo se manifiestan exactamente. Junto con el médico, estos datos pueden ayudar a determinar cuál es la razón exacta del dolor.
Posibles causantes de dolor de cabeza son la falta de sueño, la insuficiente ingesta de líquido, el ruido del entorno, un exceso de consumo de medios y tecnología o una forma de vida poco sana.
Fuente: TN/Con Bienestar