El actor aseguró que es muy habilidoso en la cancha y aunque se dedicó al arte, sigue un intenso entrenamiento para estar en forma.
Invitado a Flor de equipo en Telefe, Diego Peretti hizo una sorpresiva revelación sobre su vida lejos de las cámaras. “Jugué muy bien al fútbol, siempre digo que podría haber sido futbolista profesional. Me hubiera encantado… es lo único que cambiaría por la actuación”, contó en diálogo con Florencia Peña y sus panelistas.
Además, en el marco de un juego grupal, reveló que, más allá de sus habilidades, la primera vez que se encontró con Diego Maradona y que iban a jugar un partido, pisó mal la pelota y se cayó al piso, quedando en ridículo frente a su ídolo. Además, aseguró que sigue un intenso entrenamiento para estar en forma vinculado con ese deporte, motivo por el que a los 60 años se siente muy cómodo trabajando en Inmaduros, la comedia que protagoniza con Adrián Suar en el teatro Nacional, con dirección de Mauricio Dayub.
Antes de meterse de lleno en la actuación, Peretti ejerció la psiquiatría, disciplina que abandonó en 1995, cuando luego de muchos años de hacer teatro independiente, comenzó a trabajar en Poliladrón, un éxito de Polka, y desde entonces no volvió al ámbito hospitalario. “Solo extraño las primeras entrevistas, en las que investigas donde esta el motivo principal de consulta”, señaló. Y destacó que en su rol artístico disfruta mucho de la libertad para divertirse con la creación de cada personaje, pero que no por eso deja de ser meticuloso a la hora de abordar cada proyecto.
En referencia a su edad, el actor reconoció que tiene la manía de restarse un año desde que era adolescente. “Es de obsesivo. Cuando llegaba el cumpleaños me daba la sensación de que no había logrado todo lo que quería hacer ese año, entonces en vez de 18 decía que tenía 17 años, hasta que se agotaba la mentira”, relató entre risas.