El jefe narco tomó la palabra en el 12° día del juicio oral y se explayó sobre el contenido de los miles de mensajes de audio encontrados en su teléfono móvil. Entre lo que dijo, confirmó que un policía asignado a Fiscalía era su informante.
Tras la difusión por parte del MPA de algunos audios que se habían escuchado en el juicio a Alvarado durante esta semana, este viernes al mediodía el principal imputado pidió la palabra para explicar qué eran esos archivos.
“Quiero declarar sobre lo que se escuchó el martes. Lo de los teléfonos espejo que se escuchó fue lo mismo que yo había dicho el primer día del juicio, cuando quise desviar la investigación”, empezó Alvarado. La referencia era a las maniobras para confundir las pesquisas que se hacían tras un atentado a balazos contra la casa de Marina Marsili, funcionaria del MPA que lo venía investigando por lavado de dinero.
La explicación de Alvarado prosiguió: “El resto de que pasaron eran sobre caballos o negocios. Yo ya dije que soy comerciante, mucho de los audios que pasaron no tenían nada que ver. Había unos de mi familia. Como yo no tengo buena ortografía, me manejo todo por audios. Por eso había como cinco mil archivos. Y yo no me privaba de nada con lo que mandaba, porque nunca pensé que iban a salir a la luz, que iban a escucharse. Así que ahí vieron que hablé de los teléfonos espejo, de campos, de Argüelles. Se vio que hablo con el Lapo, con Almada. En uno digo algo de los papeles del campo y la Amarok, haciendo referencia a que Fiscalía me iba a querer achacar el homicidio. Porque nosotros ya veníamos sabiendo para dónde iba la Fiscalía, por lo que hablábamos con Báncora”. Allí, el imputado hace referencia a la filtración que tenían los investigadores del MPA, porque el policía que integraba el equipo pasaba datos a Alvarado, a quien debía perseguir.
Por eso, según Esteban Alvarado, habló de la camioneta: “Eso es el mensaje de que estábamos complicados, de la camioneta Amarok blanca. Y hay otro mensaje que digo: ‘A mí no se me escapó nada, fue al otro boludo’. Eso lo quería decir por los abogados. Porque yo quería hacer todo derecho. Ponerme bajo investigación, pero en libertad. Como vi que no se iba a poder hacer eso, ahí dije eso del ‘boludo’. Porque ya sabíamos que si nos agarraban, no iba a haber eximición de prisión”.
“Hay otros audios que se escucharon y no recuerdo en este momento. Pero fueron todos mensajes posteriores al homicidio. Y en ningún mensaje, señores jueces, hablé de balaceras, de atentar contra Tribunales, contra el Centro de Justicia Penal o contra la señora Marsili. Tampoco hablo de hacer un homicidio (sic) a Maldonado. Y ustedes vieron que yo uso mucho los audios. Por eso me encontraron como seis mil audios”, finalizó Esteban Maldonado.
La recomendación de hablar sobre el tema surgió tras charla telefónica con su asesor letrado, Lucas Peirone.