El artista se enojó cuando llegó la policía y le pidió que finalizara su actuación. Enfurecido se fue luego de tirar el micrófono al piso.
El popular folklorista protagonizó un escándalo la madrugada de éste viernes, cuando daba un show en la localidad de Vaqueros en su provincia natal, Salta. Llegó la policía al local donde cantaba el Chaqueño para dar por finalizado el espectáculo, debido a que se había excedido el horario autorizado.
Aún sobre el escenario, el artista, micrófono en mano explicó a los espectadores que se iba a retirar del lugar y que si lo querían volver a ver, tendría que ser en otro sitio, porque a Vaqueros no volvería. “Yo no soy un delincuente, soy pueblo”, se quejó y acto seguido estampó el micrófono contra el piso del escenario.
Según explicaron participantes del evento llamado “Vaqueros le canta a Güemes”, debido a la gran cantidad de artistas locales que actuaron, el Chaqueño subió a escena pasadas las 4 de la madrugada del viernes y su show se extendió sobre lo acordado con las autoridades locales para su finalización. Tal es así que a las 6:30 de la mañana la policía lo sorprendió al subir al escenario e intimidarlo para que cerrara su actuación, algo que hizo, luego de jurar que nunca más volvería.