El legislador y médico Jorge Querey informó que el actual senador tuvo una pequeña oclusión en un vaso sanguíneo en la parte posterior del cerebro, cuando se encontraba en la Cámara alta. Durante su presidencia (2008-2012) a Lugo se le detectó un cáncer linfático que no tendría relación con el actual diagnóstico.
Se detectó un sangrado en el cerebro de Lugo, por lo que se resolvió practicarle una intervención endovascular para detectar en qué parte específica se produjo y, de paso, determinar si era posible controlarlo sin necesidad de una cirugía, explicó Querey este miércoles por la noche, al dar el último parte sobre el estado del exmandatario.
Querey afirmó que Lugo seguía en estado grave aunque no se podía realizar ningún pronóstico certero y subrayó que todo paciente que ingresa a terapia intensiva está expuesto a eventuales complicaciones, según el diario asunceño Última Hora.
Lugo “sufrió un derrame de origen isquémico” cuando se encontraba en su oficina del Senado, explicó Querey, médico y senador del partido de izquierda Frente Guasú (Frente Grande), al que pertenece el exmandatario, en su primer informe..
Su cuadro era “estable, pero está conectado a un respirador y en coma inducido”, estado en el que permanecería al menos hasta este jueves, indicó Querey.
“Dentro de la complejidad, la situación está controlada; si no tenemos una sorpresa, el pronóstico es bueno”, agregó Querey, al tiempo que precisó que “el sangrado que tuvo es pequeño gracias a los medicamentos que ingiere”, según la agencia de noticias AFP.
Lugo había regresado a Paraguay el lunes “ya con síntomas” desde Colombia, donde asistió a la ceremonia de asunción del presidente Gustavo Petro, dijo a la prensa la legisladora Esperanza Martínez, quien lo acompañó en ese viaje.
“Es una persona hipertensa y estaba siguiendo tratamiento”, comentó Martínez tras aclarar que Lugo “es un paciente de riesgo”.
Querey recordó que Lugo es un “paciente con un tratamiento de larga data” que recibe medicación permanente para la coagulación y la circulación.
El exmandatario fue diagnosticado en 2010 de un cáncer de linfoma en etapa inicial, por el que recibió tratamiento en Brasil y se recuperó en 2012.
Lugo, un exobispo católico, gobernó Paraguay entre 2008 y 2012. Su triunfo electoral en 2008 terminó con 61 años de hegemonía del Partido Colorado.
Ha sido hasta ahora el único mandatario que no pertenece al derechista Partido Colorado desde que esa fuerza política asumió el poder en 1954, primero bajo la dictadura de Alfredo Stroessner y a partir de 1989 en democracia.
Lugo fue destituido de la presidencia en junio de 2012, nueve meses antes de las elecciones presidenciales, mediante un controvertido juicio político en el Congreso, acusado de mal desempeño de sus funciones.
Fuente: Telám