El fiscal Omar De Pedro ordenó restituir a sus dueños a decenas de galgos rescatados a principio de mes, poco antes de que se desarrollara una carrera en un predio en Santo Tomé. En ese entonces, fueron demoradas más de 150 personas de varias provincias y rescatados 77 perros.
La carrera, que se iba a realizar en un predio ubicado en cercanías de la autopista Santa Fe-Rosario, fue frustrada por las autoridades luego de varias semanas de investigación. La fiscal Rosana Peresín inició una causa por infracción a la ley número 27.330, sancionada en noviembre de 2016, que prohíbe la realización de carreras de perros, cualquiera sea su raza.
Dicha norma establece que «el que organizare, promoviere, facilitare o realizare una carrera de perros, cualquiera sea su raza, será reprimido con prisión de tres meses a cuatro años», además de multas que al ser sancionada la ley iban de cuatro mil a 80 mil pesos.
En un primero momento, voceros de la investigación indicaron que los perros no iban a ser devueltos a quienes los llevaron al predio y alrededor de 40 animales fueron trasladados por la Brigada Ecológica hacia Rosario.
«Nos pidieron a distintas protectoras que acomodemos a los perros en tránsito porque estaban en un deposito judicial hasta que se resolviera qué hacer. Jamás pensamos que se los iban a devolver a los galgueros argumentando que no están en mal estado de salud», denunciaron desde la ONG Animalistas de Rosario
Y agregaron: «El fiscal amenaza con imputarnos a nosotros si no entregamos a los galgos. Por una cuestión de tiempo, no llegamos a presentarnos como querellantes. Cuando hay manos pesadas en el medio a nadie le importa. Los inyectan y sufren todo tipo de hostigamientos para que corran y así les hagan ganar plata»
