Esta mañana se hizo la prueba de los scanner en la Unidad Penitenciaria N° 1 de Coronda. Luego hicieron lo propio en la cárcel de Piñero.
El gobierno de la provincia, a través del Ministerio de Seguridad, realizó este viernes la prueba para la colocación de scanner en la Cárcel de Coronda. Allí participó el ministro de Seguridad, Claudio Brilloni.
Al respecto, Brilloni destacó que “La tecnología que estamos incorporando es muy costosa, es un proceso licitatorio complejo. Debe estar ajustado a la legalidad para darle legitimidad. Estos equipos van a permitirnos controlar todo lo que ingresa para evitar que se ingresen armas, drogas y teléfonos celulares”.
De igual manera lo hizo el secretario de Asuntos Penitenciario, Walter Gálvez. “Lo que se está poniendo en funcionamiento hoy tiene que ver con el objetivo que nos hemos trazado. Queremos hacer más rigurosos los ingresos, generar más controles, porque queremos saber todo lo que ingresa en cada unidad del Servicio Penitenciario. Empezamos por Las Flores, Coronda y Piñero”.
Gálvez agregó que “el equipamiento es de última generación: un body scann que a través de 360º y por rayos X detecta todo lo que tiene el cuerpo humano, una cinta transportadora de carga que va a examinar todo lo que ingresa la visita y un arco detector de metales para los empleados del Servicio Penitenciario, para controlar fundamentalmente el ingreso de teléfonos celulares”.
EL SISTEMA DE BODY SCANNERS
Se trata de tecnología de última generación que tiene como objetivo detectar el ingreso de elementos prohibidos al servicio penitenciario. Serán utilizados tanto para el registro de las visitas, como del propio personal de seguridad. El primero, un detector por el que ingresarán todos los bolsos, mochilas o equipajes que las visitas de los presos y los agentes penitenciarios lleven a las instalaciones.
Respecto al body scan o scanners corporal, es un aparato que utiliza rayos x para poder observar bajo algunas capas físicas, como ropa, la piel, etc. El sistema permitirá detectar amenazas ocultas o, incluso, dentro del cuerpo o en las cavidades corporales, como por ejemplo armas metálicas y no metálicas, drogas, teléfonos celulares, contrabando de todo tipo, explosivos, herramientas. Por último, la instalación también contempla un detector de metales.