En los últimos 10 años se registraron 504 fallecimientos de personas bajo custodia del SPF, con un pico de 58 en 2020, a raíz del impacto que produjo la pandemia de COVID-19.
Durante 2022 se registraron 42 muertes en 12 cárceles del Servicio Penitenciario Federal, 16 menos que en 2020, según el informe anual realizado por la Procuraduría de Violencia Institucional (PROCUVIN).
La cifra, que es parte del informe anual Muertes en contexto de encierro, fue elaborado por el Área de Análisis e Investigaciones Interdisciplinarias.
De las 42 muertes ocurridas el año pasado, el 76,2% (32 casos) se produjeron de manera no violenta. El resto (10), fueron resultado de actos lesivos, entre los que se registraron cinco suicidios por ahorcadura; mientras que cuatro muertes se produjeron por heridas cortopunzantes y otra fue resultado de quemaduras. Uno de los fallecidos dentro del grupo clasificado por muertes violentas era un ciudadano de Chile y el resto eran argentinos.
En relación a los 32 fallecidos en forma no violenta, el informe señaló que siete eran extranjeros procedentes de Paraguay (2), Uruguay (2), Brasil (1), Chile (1) y la Federación Rusa (1).
Según detalla el documento, en los últimos 10 años se registraron 504 fallecimientos de personas bajo custodia del SPF, con un pico de 58 en 2020, a raíz del impacto que produjo la pandemia de COVID-19.
El informe ofrece también la evolución de la cantidad muertes en la última década: 57 en 2012; 45 en 2013; 51 en 2014; 40 en 2015; 36 en 2016; 41 tanto en 2017 como en 2018; 50 en 2019; 58 en 2020; y 43 en 2021.
El reporte indica que, luego del pico de 2020, se mantienen estables los valores respecto a 2021, tanto para muertes violentas como no violentas, por lo cual, conforme la tendencia de los últimos años, continúa la mayor proporción de fallecimientos no traumáticos.
Las muertes ocurridas, según se relevó, ocurrieron en el Complejo Penitenciario Federal (CPF) I de Ezeiza (15); le siguen el CPF II de Marcos Paz, con 7; y el CPF de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con 4.
En relación a la situación procesal de las personas fallecidas, el informe señala que 57,1% (24 casos) no tenía condena firme y que el 42,9% restante (18 casos) estaban condenadas.
Del total de 42 personas fallecidas, 13 llevaban menos de un año detenidas (30,9%) y, de todas ellas, 10 no habían cumplido aún seis meses privadas de libertad.
En cuanto a la edad, el documento indica que las personas fallecidas tenían entre 27 y 93 años, y que el promedio etario de ese grupo es de 49,3 años. Precisa al respecto que 14 de los 42 casos registrados corresponden a reclusos de menos de 40 años de edad, es decir el 33,3% del total de casos.
Fuente: NA