AMRA, respetuoso de las instituciones, acata dicha conciliación obligatoria y, por ende, la medida de fuerza queda en suspenso hasta tanto las partes se vuelvan a reunir, algo que ocurrirá el próximo martes 25 de julio.
Más allá de la situación legal y el levantamiento de la medida de fuerza, como entidad gremial no podemos soslayar que está decisión del poder ejecutivo impide el derecho constitucional a la huelga.
Es inadmisible que profesionales de la salud, que durante largos dos años fueron considerados “héroes” por su aporte a la comunidad y declarados esenciales, ahora no tengan la mínima posibilidad de expresar su malestar mediante un ejercicio avalado ni más ni menos que por la Constitución Nacional.
Todo esto, a su vez, agravado por la inmovilidad del poder legislativo que no logró en dos años hacer una modificación en una ley para permitir el ingreso de nuestros compañeros de más de 40 años, que casualmente, son la mayoría de los que enfrentaron la pandemia
Como dijimos, acataremos y seremos respetuosos de las instituciones, pero no dejaremos de reclamar, mediante los mecanismos que sean necesarios para defender los derechos de los profesionales y las profesionales de la salud.
“DONDE HAYA UN PROFESIONAL DE LA SALUD TRABAJANDO ESTARÁ EL SINDICATO”
