El peor incendio del año en Grecia causó un muerto y seguía ardiendo el martes en las afueras de la capital, Atenas, aunque los vientos más suaves y los esfuerzos de los bomberos habían ayudado a reducir su intensidad, según las autoridades.
Cientos de bomberos, apoyados por camiones cisterna y aviones hidrantes, luchaban contra las llamas que estallaron el domingo cerca del pueblo de Varnavas, a 35 kilómetros al norte de Atenas, e incendiaron viviendas, vehículos y franjas de bosque seco.
Avivado por vientos huracanados, el fuego saltó el lunes de una zona boscosa y montañosa a los suburbios, ahogando la ciudad con humo y cenizas y sembrando el pánico en unos barrios que no habían visto un incendio tan cercano al centro desde hacía décadas.
Hace un día llegó a Vrilissia, a unos 14 km del centro de Atenas, donde se encontró a una persona muerta, según los bomberos.
Aún no se ha determinado la causa del incendio.
Se esperaba que los vientos volvieran a arreciar a última hora del martes y el país permanecerá en alerta máxima por incendios hasta el jueves, con fuertes vientos y temperaturas que se prevé que alcancen hasta los 40 grados centígrados.
“El panorama general parece haber mejorado, pero sigue habiendo muchos frentes en varias zonas”, dijo un responsable de los bomberos.
Los incendios han sido una característica habitual de los veranos griegos durante años, pero el cambio climático ha traído un tiempo más caluroso y menos lluvias, condiciones ideales para los fuegos a gran escala.
Este año, el país del sur de Europa ha vivido el invierno más caluroso de su historia y va camino de vivir el verano más caluroso, con escasas lluvias en muchas zonas desde hace meses.
El empeoramiento de la situación se repitió en todo el sur de Europa, incluida España y los Balcanes.
El incendio en Grecia dejó a su paso casas abandonadas, automóviles quemados y campos carbonizados. Según el periódico local Proto Thema, los daños abarcan 100 kilómetros cuadrados e incluyen 100 viviendas.
Grecia ha activado el mecanismo europeo de protección civil y espera la ayuda de Francia, Italia y Chequia con aviones y bomberos. España y Turquía también han ofrecido ayuda.
Más de 30 zonas tuvieron que ser evacuadas, así como al menos tres hospitales, y se produjeron cortes de electricidad en partes de la región de Atenas. Los transbordadores de pasajeros que se dirigían al puerto de Rafina, al noreste de la capital, fueron desviados.
La policía ayudó a evacuar a más de 250 personas y algunos residentes pasaron la noche en refugios.