Venezuela confirmó la detención del gendarme argentino Nahuel Gallo y lo acusó de ser espía. Diosdado Cabello, ministro de Interior y Justicia, aseguró que Gallo viajaba frecuentemente, lo que generó dudas sobre su verdadera misión en el país.
Cabello destacó que el gendarme tenía un estilo de vida que no coincidía con su salario de 500 dólares mensuales. A través de su cuenta en redes sociales, mostró imágenes de los viajes de Gallo y cuestionó: “¿Qué venía a hacer a Venezuela?”. Insinuó que podría haber estado involucrado en una misión encubierta.
El ministro también criticó a la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, acusándola de provocar tensiones. Relacionó sus acciones con la disputa histórica de Argentina y el Reino Unido por las Malvinas.
En cuanto a la situación legal de Gallo, Cabello aseguró que la justicia venezolana está manejando el caso. “Aquí hay una Justicia que funciona de verdad”, comentó el ministro. Además, destacó que la falta de relaciones diplomáticas con Argentina complicaría la situación.
Elisa Trotta, del Foro Argentino por la Defensa de la Democracia, denunció el hecho como una violación de derechos humanos y leyes internacionales.