En el corazón del departamento de Castellanos, la escuela rural de María Juana revoluciona la educación tradicional con su enfoque en el aprendizaje al aire libre. Ubicada frente a un monte de eucaliptos que alberga las ruinas de una antigua estación de ferrocarril, esta institución ofrece un entorno único para la exploración y el crecimiento.
Al respecto, Julieta Gómez, directora del Centro Educativo Rural (CER) 337 y el Espacio Educativo al Aire Libre (Eeal), explicó en EME: “Logramos transformar esta escuela rural en un espacio al aire libre, trabajando con el contexto y explorando los espacios naturales como nuestra aula”.
Además, precisó que “este enfoque se centra en proporcionar una educación de calidad, utilizando los elementos del entorno para enseñar a los estudiantes”.
El modelo educativo de María Juana se basa en la interacción con la naturaleza, utilizando plantas, animales y rocas como recursos didácticos. “Se necesita una educación de calidad que se adapte a los contextos diferentes”, enfatiza Gómez. La escuela ha expandido este espacio para todos los niveles escolares, demostrando su compromiso con la innovación educativa.
La iniciativa forma parte de la Red de Comunidades de Aprendizaje del Ministerio de Educación de Santa Fe, que promueve la educación al aire libre y la conexión con el entorno natural. La escuela rural de María Juana se une a otros Espacios Educativos al Aire Libre (EEAL) en la provincia, como “La Tandilera” en Chovet y “Estación Ingeniero Boasi” en Sarmiento.