El lugar, a 30 kms. de la Ciudad de Buenos Aires, funcionó como un centro clandestino de detención y torturas durante la última Dictadura.
El presidente Mauricio Macri propuso hoy convertir en “un parque nacional” parte del predio militar de Campo de Mayo, en la zona oeste del Conurbano bonaerense, que funcionó como un centro clandestino de detención y torturas durante la última Dictadura. “Será uno de los parques nacionales urbanos más grandes del mundo y parte del sistema de áreas protegidas del Área Metropolitana” de Buenos Aires, dijo Macri en la apertura las sesiones ordinarias de la Asamblea Legislativa. El jefe de Estado consideró que, de ese modo, los argentinos podrán “vivir cerca de un lugar verde” en el que puedan “conocer y preservar la naturaleza”.
Campo de Mayo es un área militar de 8.000 hectáreas que pertenece al Ejército argentino y está situada a unos 30 kilómetros de Buenos Aires. Allí funcionaron durante la más dictadura militar centros clandestinos de detención y torturas en los cuales, según pruebas judiciales, fueron asesinados 5.000 personas. El lugar estaba dirigido por el entonces comandante Santiago Riveros, condenado en dos ocasiones a prisión perpetua por los crímenes cometidos allí.
Diferentes testimonios de víctimas mencionaron ante la Justicia que en el predio podrían estar enterrados los cuerpos de muchas de las personas asesinadas allí. Además, en el predio funcionó un hospital militar en el que más de 30 mujeres secuestradas dieron a luz a sus hijas e hijos, muchos de los cuales fueron apropiados en forma ilegal y son buscados, entre otras organizaciones, por la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo. “En Campo de Mayo funcionó un centro clandestino con 5.000 víctimas y nacieron bebés en cautiverio, jóvenes que siguen siendo buscados por Abuelas de Plaza de Mayo. No es un lugar para Parques Nacionales”, cuestionó en Twitter la organización de derechos humanos Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio (HIJOS).