María Laura Pagani, directora del Instituto de Estudios del Transporte de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) advierte que “El centro de Rosario está colapsado”.
Para la profesional este problema tiene su principal origen en la cantidad de vehículos que ingresan a diario al sector. Considera que hay que tomar medidas para restringir la circulación de autos particulares en el centro sin que esto signifique una condena a muerte para el área.
Algunos datos que forman parte del monitoreo permanente que realiza el Ente de la Movilidad indican que diariamente cerca de 300 mil vehículos ingresan al centro de la ciudad. El pico de este tráfico se produce en sólo tres horas, entre las 7.30 y las 10.30, cuando un promedio de 54 mil coches se agolpan para circular por las estrechas calles de la zona céntrica limitada por Oroño, Pellegrini y el río.