Durante años has escuchado que el desayuno es el alimento más importante del día y que, por lo tanto, jamás debes saltártelo. Sin embargo, ayunar, al menos unas pocas veces cada semana, puede generarle excelentes beneficios a tu organismo.
”Muchas personas que se saltan el desayuno o practican el ayuno intermitentemente también son saludables”, reveló el Dr. John Berardi, cofundador de Precision Nutrition a GQ.
Desde la posibilidad de que pierdas algunos kilitos hasta evitar el envejecimiento, aquí algunas de las razones por las que Berardi recomienda que te saltes el desayuno (de vez en cuando).
1. Comerás menos
Si omites el desayuno, podrías comer menos comidas más grandes comenzando más tarde en el día, en lugar de seis comidas muy pequeñas, lo que suele ser menos satisfactorio. Esto puede reducir tu ingesta calórica total durante la jornada y ayudarte a perder peso.
2. Tu nivel de azúcar estará estable
3. Ingerirás menos carbohidratos
Saltarte el desayuno puede ayudarte a estar lejos de los alimentos ricos en carbohidratos (como las donas, los antojitos, entre otros), los cuales pueden desencadenar una respuesta a la insulina que afectará tu quema de grasa.
4. Producirás más hormona del crecimiento
Saltarte el desayuno también puede hacer que tu cuerpo libere más hormona del crecimiento, lo que es excelente para preservar el tejido magro y quemar el tejido graso.
5. Tu cuerpo se sintonizará
Si eres una de las muchas personas que siente nauseas por las mañanas, quizá los grandes desayunos no son para ti. Al optar por beber un vaso de agua con limón o un jugo verde, podrías darte cuenta que tu cuerpo se siente mucho mejor si ayunas.
Saltarte el desayuno es una excelente opción siempre y cuando tu dieta sea mayormente saludable. Recuerda que si tienes dudas, lo mejor es que consultes a un especialista.