Lucas Biglia habló por primera vez de la patada que recibió por parte de Alejandro Papu Gómez que puso en riesgo su presencia en el Mundial y de lo que hubiese esperado por parte de su compatriota.
“Esperaba que me dijera ‘perdoname'”, reconoció el mediocampista del Milan y de la selección argentina, quien agregó: “No me puse a pensar en nada después del golpe. Llegué al vestuario, me tiré en la camilla, me pusieron hielo, me di cuenta de que era lo mismo de la primera vez agarré el teléfono, le escribí a mi fisioterapeuta y empecé de cero con la recuperación”.
Respecto del accionar de Papu Gómez, Biglia añadió: “Le tienen que preguntar a él por qué hizo lo que hizo. No somos amigos, hay que preguntarle a él qué le paso por la cabeza. Fue un contacto del fútbol, me lo banco porque pasó dentro de una cancha aunquereaccioné así, mal, sabiendo que era él quien estaba detrás mío”, dijo.
El jugador del Milan se refirió también a las disculpas que Gómez pidió en una de sus cuentas en redes sociales: “Yo no uso redes porque vengo de una generación tal vez más vieja. Cada uno expresa lo que tiene que expresar a su manera, yo hubiese pedido disculpas en el campo, de hecho es lo que hago. Yo juego en una posición donde la fricción es permanente y siempre pido disculpas. Incluso el chico de Benevento que fue el primero que me lesionó me vino a ver al hospital…”.