Mañana se definirá la fecha; buscan sumar a todo el transporte; Pichetto visitó ayer la central sindical y apoyó a los gremios.
La decisión ya está tomada. La CGT activará este mes el tercer paro general en contra de la gestión de Mauricio Macri. Mañana, en la reunión de consejo directivo, se definirá cuándo será la protesta. Se deliberará entre dos fechas: la semana próxima, entre el martes y el jueves, o a fines de junio, el 27 o 28. Ya no habría marcha atrás.
La huelga sería por 24 horas y sin movilización. Si es la semana que viene, coincidirá con la medida de fuerza que orquestan las dos vertientes de la CTA, los docentes y los gremios rebeldes de la CGT que se encolumnaron detrás del camionero Pablo Moyano.
Juan Carlos Schmid y Héctor Daer, dos de los tres integrantes del triunvirato de mando de la CGT, están decididos a avanzar hacia el paro y ya lo manifestaron internamente. Diferente sería la postura del barrionuevista Carlos Acuña, quien quedó desdibujado tras un acercamiento de Luis Barrionuevo con la Casa Rosada.
“Hablé con Triaca antes de que se vaya a Ginebra y le sugerí que él y Dujovne revaliden públicamente las cláusulas de revisión de las paritarias para compensar la caída salarial. Le dije que lo anuncien en conferencia, que sería un gesto de confianza. Pero no lo hicieron”, argumentó Schmid una de las razones del malestar sindical. Schmid trabaja para sumar al paro a todos los gremios del transporte.
Daer, que apuesta a dilatar la medida de fuerza hasta que se conozcan detalles de la negociación con el Fondo Monetario, logró encolumnar finalmente a los gremios que dudaban en levantar un perfil combativo, como la Uocra, Luz y Fuerza y la UOM.
“Las condiciones de ir al paro están, hay que sumar masa”, dijo la semana pasada uno de los referentes cegetistas. En esa lógica de reunir respaldos se enmarcó el encuentro de ayer con Miguel Ángel Pichetto y otros senadores peronistas.
“Coincidimos en el diagnóstico sobre la pérdida de empleo, del poder adquisitivo del salario y la presión de las tarifas. Actuaremos con la CGT en el tratamiento de las leyes laborales que se debatan en el Congreso”, dijo Pichetto tras la visita a la sede cegetista. El senador les anticipó a los sindicalistas que se acordó con Cambiemos tratar el proyecto para crear una agencia de evaluación de tecnologías de la salud. Es parte de la reforma laboral, aunque el capítulo menos resistido, ya que fue especialmente empujado por los gremios porque beneficiará a las obras sociales. Al margen de este guiño oficial y de las gestiones de Triaca en Ginebra, el paro sería inevitable.