La reina Máxima de Holanda agradeció a los ciudadanos en un breve y emotivo discurso las numerosas muestras de apoyo recibidas tras la muerte de su hermana, Inés Zorreguieta. “Mi pequeña, querida y talentosa hermana Inés estaba enferma. No era capaz de encontrar la alegría y no pudo recuperarse“, dijo Máxima en la ciudad de Groninga, donde visitó un centro de atención terapéutica.
En declaraciones a la prensa y visiblemente emocionada, Máxima aseguró que “el único consuelo” de la familia es que Inés “ha encontrado la paz“. Máxima agradeció el apoyo de la gente y dijo que “realmente ayudó” para atravesar el duelo estas dos semanas, a la vez que reconoció a “los que han mostrado respeto por la privacidad” tanto de la familia real como los Zorreguieta durante el funeral.
“Quiero expresar mi gran agradecimiento por las muchas cartas, los múltiples mensajes y otros gestos de simpatía. Nos ha ayudado de verdad. También quiero agradecer el respeto que todos han mostrado por mi familia en estos tiempos difíciles”, afirmó.
Una portavoz de la Casa Real comunicó a principios de junio que Inés Zorreguieta había fallecido “presumiblemente por suicidio”. Debido a la muerte de su hermana, Máxima no acompañó a su marido, el rey Guillermo Alejandro, a una visita de Estado a Letonia, Estonia y Lituania.