Ayer, el vicecanciller británico Alan Duncan anunció el fin del bloqueo.
El proceso de deshielo en la relación entre la Argentina y Gran Bretaña continúa. Ayer, el vicecanciller británico Alan Duncan anunció el fin del bloqueo de la ventas de armas a la Argentina, que había sido impuesto en 2012, durante el gobierno de Cristina Kirchner.
La medida permitirá, como efecto inmediato, importar turbinas de tecnología Rolls Royce para el ARA Heroína -un buque de superficie- y ruedas para aviones Pampa.
También podrán importarse de otros países equipos que contengan insumos británicos que, por el embargo, no eran de acceso posible.
Seguirán vigentes las restricciones sobre la venta de equipos que puedan mejorar la capacidad militar de la Argentina.
La relación entre ambos países registra como historial reciente los gestos de cooperación para la búsqueda del submarino ARA San Juan , como también la participación del gobierno británico en la identificación de los soldados argentinos sepultados en el cementerio de Darwin.
En esta sintonía, el secretario británico de Relaciones Exteriores, Boris Johnson, visitó Buenos Aires en mayo -fue la primera visita desde 1993-, como una demostración más de la mejora en la relación bilateral entre el Reino Unido y la Argentina.
“Tras estos acontecimientos positivos, el Gobierno cree que es apropiado levantar ahora las restricciones adicionales de 2012”, comunicó el parlamentario británico y ministro de Estado para Europa y las Américas, Alan Duncan.
Se seguirán denegando las licencias de exportación y comercio de bienes que puedan mejorar la capacidad militar argentina, pero se podrán otorgar licencias cuando se juzgue que estos no van en detrimento de los intereses de defensa y seguridad del Reino Unido.
La gestión que se llevó adelante para consensuar esta medida, que fue aprobada en el Parlamento británico, estuvo encabezada por el secretario de Asuntos Internacionales del Ministerio de Defensa, José Luis Vila, y por el embajador argentino en Londres, Carlos Sersale di Cerisano.
“Esto es fruto de la política llevada adelante por el Gobierno, que atravesó desde la gestión de Malcorra hasta la del canciller Jorge Faurie”, dijo Vila.
Los antecedentes en la relación de ambos países -aclaró Vila- no forman parte de ninguna negociación, sino que fueron gestos solidarios producto de “la confianza y el progreso en la relación de los gobiernos”.
Esta iniciativa fue llevada adelante bajo el “paraguas de soberanía de Madrid”, establecido en 1989 entre ambos países.
Fuente: La Nación