En las últimas horas, quedó en libertad el agente penitenciario que mató a un compañero de un disparo en el pecho dentro de la cárcel de Piñero. La liberación del guardiacárcel se debe a que en las primeras investigaciones no hay elementos para sostener que el disparo fue intencional, ya que se habría tratado de un disparo accidental o por una maniobra negligente.
Para tratar de determinar lo sucedido, la fiscalía citó como testigo a otro empleado del lugar, un tercer agente que se encontraba junto con los protagonistas del hecho, cuyo testimonio es de vital importancia para la causa.