Sólo falta que la comisión de Salud le de su aval para que se apruebe la iniciativa del edil Eduardo Toniolli. Se acelerarán las gestiones por inclusión laboral y asistencia alimentaria.
Crece la posibilidad de que en Rosario se declare la Emergencia Social. La iniciativa sumó apoyo en el Concejo y sólo falta un paso: la aprobación en la comisión de Salud. Se trata de agilizar las gestiones relacionadas a la inclusión social y asistencia alimentaria.
Ayer en la comisión de Presupuesto del Concejo se aprobó una iniciativa del edil Eduardo Toniolli producto de un acuerdo entre parte de la oposición, el oficialismo municipal y las organizaciones sociales que se movilizaron el 7 de agosto pasado al cuerpo legislativo local. El proyecto, que originalmente planteaba la Emergencia Alimentaria, se basa en un diagnóstico crítico compartido con respecto a las consecuencias de las políticas económicas nacionales sobre los sectores más vulnerables.
La iniciativa promueve la realización de gestiones del Municipio ante la Provincia y la Nación para solicitar distintos programas de inclusión laboral y de asistencia alimentaria directa para sectores afectados por la situación económica, y dispone el monitoreo de la situación alimentaria de niños, niñas y adolescentes de entre 0 y 14 años, para atender el crecimiento de la demanda en la materia.
Al proyecto sólo le resta el paso por la comisión de Salud del Concejo Municipal, pero “debido al amplio acuerdo logrado hasta el momento, se descuenta su aprobación en la sesión de la semana que viene”, indicó el concejal.
“Rosario siempre ha sido una ciudad muy atada a los ciclos nacionales, y hoy no es ajena a las consecuencias de la brutal devaluación que sufrió nuestra moneda en los últimos días, que ya se está trasladando a los precios de los alimentos”, expresó Toniolli, y agregó que “el mismo Macri asumió públicamente que las medidas que va a ir tomando, al calor de las imposiciones del FMI, van a generar más pobreza, por lo tanto es necesario que todos los niveles del Estado pongan lo que hay que poner para evitar un drama social de proporciones”.